Elecciones Municipales y Regionales 2010, Saber elegir…

Por: Lic. Edwin R. Goicochea Quispe

La Historia, a estas alturas parece haber puesto en nuestras decisiones otra gran esperanza de poder saber elegir la mejor opción de gobernar; a puertas de las elecciones generales, para elegir al próximo Presidente de la República y de los congresistas, se presenta las elecciones municipales y regionales; cabe recordar que las primeras elecciones municipales en el Perú se llevaron a cabo durante el primer gobierno de Fernando Belaúnde en 1963, teniendo como contendores políticos a las alianzas electorales de Acción Popular (AP) y la Democracia Cristiana (DC) por un lado y la coalición del APRA y la Unión Nacional Odriísta (UNO), por el otro.
Sin embargo, habiendo sufrido nuestro país la dictadura militar los alcaldes tuvieron que ser elegidos de manera directa, perdiendo nuevamente el derecho democrático. Habiendo recuperado el estado de derecho en 1980, las autoridades municipales volvieron a ser elegidas por medio del voto popular. La democracia incorporaba a los iletrados por primera vez al voto, con lo que la población electoral crecía de manera fabulosa.
En el siglo pasado (década del 80) los partidos políticos tradicionales se veían ampliamente favorecidos, donde se podía observar que los resultados electorales municipales estuvieron estrechamente ligados a la suerte del partido de gobierno presidencial; siendo estos grandes beneficiados partidos políticos como Acción Popular (AP) que en 1980 ganó el 70% de las alcaldías y el APRA que en 1986 copaba el 90% de las municipalidades.
Contrariamente a lo visto en el siglo pasado, en las recientes elecciones municipales y regionales (2002 y 2006) los grandes vencedores han sido los independientes, con marcados éxitos que vienen desde las elecciones de 1993, fecha en que de 185 provincias lograron ganar en 66. Desde aquellas elecciones las li32456wstas “independientes” han captado la mayoría de las confianzas electorales.
El 30 de enero de 2010, el Presidente de la República convocó a Elecciones Regionales y Municipales mediante Decreto Supremo Nº 019-2010-PCM, y de acuerdo a lo que le faculta la Ley Nº 29470 y la Ley Nº 26864; debiendo estas regirse de acuerdo a lo dispuesto en la Constitución Política del Perú, en la Ley Nº 26864 - Ley de Elecciones Municipales y en la Ley Nº 27683 - Ley de Elecciones Regionales, así como en sus correspondientes modificatorias.
Estas elecciones convocadas para el próximo domingo 3 de octubre, trae entre sus novedades el establecimiento de la valla del 30% de votos válidos para ser elegido Presidente o vicepresidente regional, y de no ser así tendría que llevarse a cabo una segunda vuelta entre los dos más votados, lo que obliga a los candidatos adecuar sus estrategias, sus propuestas y presupuestos a este contexto. Asimismo se señala que lista de candidatos al consejo regional deberá incluir no menos del 20% de ciudadanos jóvenes menores de 29 años de edad, lo que antes era una obligación sólo la cuota de 30% de hombres o mujeres y de 15% representantes de comunidades nativas.
Lo que significa que las organizaciones políticas tendrán que pensar en captar para las candidaturas de alcaldes y consejeros de cada provincia, a las mejores personalidades que tengan ascendencia y respeto de sus electores, lo que reduciría la dispersión del voto. Naturalmente deberán de contar con un plan de gobierno, técnicamente elaborado y atrayente para sus electores. Evidentemente estas disposiciones parecen favorecer a la población, toda vez que se espera que los afanosos políticos tengan que contar con planes de gobierno e instrumentos convincentes para lograr el desarrollo sostenible de su territorio.
Parece haber servido de experiencia que hasta la actualidad existan autoridades locales y regionales que no ha mostrado voluntad de poner en práctica los mecanismos de participación, imponiéndose con su autoritarismo y no queriendo perder “poder”, demostrando además muchas limitaciones en capacidad de gestión e inversión de los recursos transferidos por el Estado.
Actualmente, se han realizado profundas reformas institucionales que han redefinido la actividad en las funciones de planificación y ejecución de inversiones, para lo cual se exige contar con herramientas básicas, programas estratégicos y alcanzar a la población los mejores servicios como agua potable, carreteras, educación, salud, modernización institucional, desarrollo económico y medio ambiente.
Queda entonces en manos de la población (electoral) decidir por contar en el periodo 2011 - 2014 con autoridades representativas, participativas y con capacidad de gestión; que sus decisiones sean las más acertadas y cumplan con lineamientos que favorezcan directa o indirectamente a sus ciudadanos.